Anoche mientras ella dormía la observe soñar. Diez de la noche. Casi adivinando el tema heroico de sus sueños me aventure a querer ser parte de ellos. Que ironía- pensé. Mientras que aquí en esta "realidad" no encuentro mi lugar en su vida, quiero ser su sueño mas profundo mientras duerme. Al verla respirar con tanta calma y tranquilidad me pregunte si algún día realmente la llegare a conocer por completo. Y es que hay veces que la miro a los ojos y la desconozco y al mismo tiempo me desconozco a mi mismo como si dos extraños se encontraran por primera vez coincidiendo por un instante, por lo que dura un suspiro, y actuaran sus lineas aprendidas en un libreto de obra. Otras veces la veo y me imagino que somos dos almas reencontradas en una vida enlazada a vidas pasadas. Como si nos conociéramos por miles de años y la historia se repitiera una y otra vez mas en mundos coexistiendo uno con el otro pero sin saber de su existencia. Once de la noche. Un respiro mas profundo y un exhalo mas intenso me tocaron la mente. Como si escuchara mis pensamientos desde aquel mundo tan seguro, aquel planeta de los sueños... me trajo de nuevo a la realidad. Y me vi a su lado de nuevo, ella dormía mientras que yo no, ella respiraba y exhalaba mientras yo soñaba. Tan cerca el uno del otro, pero separados por una barrera imaginaria que divide al que sueña del que vive en esta realidad. Pero no es esta barrera como la que separa al que ha muerto del que vive. O lo es? pero solo esta barreara es temporal. El pensamiento de la muerte me hizo recordar cual de niño que tan aferrado y dispuesto estaba en aprender todo al respecto de esta fase de la vida. Simplemente el solo pensamiento de morir me exaltaba y despegaba mi imaginación, a lo infinito... a un espacio donde solo existían las interrogativas. Se dieron las doce confundido por no poder asimilar si en realidad era esto un sueño o seguía despierto. Me canse de intentar obtener la respuesta y me deje derrotar por el cansancio asimilando que tal vez en algún punto de esta noche había entrado al mundo de los sueños junto a tu lado. De repente el tiempo se detuvo y el reloj en la pared se burlo de mi. El reloj volvió a marcar las diez de la noche y desperté a su lado.
Sigo observando las horas pasar. No recuerdo el comienzo y mucho menos se que hago aquí. Solo se que espero, pero igual… tal vez eh estado en este mismo lugar esperando por horas o tal vez días. La gente pasa frente a mi caminando, trotando, deslizándose sin cuidado, y así, sin darse cuenta de mi existencia. Unos caminan solos, otros en pareja, varios caminaban sonrientes en familia, note también a unos que pasaban en grupos. Unos de ellos iban uniformados, trajes ejecutivos, servicio público, limpieza, etc. Así iban todos. Todos tan diferentes, y al mismo tiempo todos tan similares. Intento recordar rostros, pero los eh olvidado ya. Sigo esperando cuando de pronto recuerdo una llamada y así recuerdo también tu voz y un recado de verte en la misma banca de anoche a las dos de la tarde frente al parque Villa Fontana. Recuerdo que he olvidado ya mi niñez y con esto, todos esos posibles gratos y bellos recuerdos en este parque. Pero nunca he olvidado que en mi un día existier
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